Acabo de recibir un email con un de esos ejemplos de phishing bancario (es la contracción de «password harvesting fishing» – literalmente cosecha y pesca de contraseñas-).

Por desgracia el phishing es un fenómeno en alza. Aunque no hay datos fiables sobre la tasa de éxito que consiguen, Según la organización Anti-Phishing (www.antiphishing.org), solo un 5% de los ataques logran su objetivo, es decir que quienes reciben el mail «anzuelo» responden, ingresen a los sitios falsos y dejen sus datos. Un dato escalofriante, que ironías aparte, ya quisiéramos los marketinianos conseguir ese ratio de conversión…

De todas formas el phishing no es un fenómeno exclusivo de los bancos, también eBay y PayPal lo sufren. Justo acabo de leer que Google colabora con eBay y PayPal para eliminar los casos de phihing en Gmail.

El caso que quería comentar es el del supuesto “Bbva”. Un ejemplo bastante malo (los he visto de mejores), pero que demuestra como poco a poco estos delincuentes van puliendo sus técnicas…

Aunque son más bien torpes con algunos detalles delatores. Detalles que -si fuera algo inocuo- serían motivo de una media sonrisa. Por ejemplo algún carácter extraño (creo que cirílico) que se ha colado en el copy y que sitúa con cierta precisión la zona de procedencia de este ataque…

Lo dicho, hay que estar atento.

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